Uno de los atractivos que tienen los cursos en Figueres es el viaje en sí mismo que implica dos largas horas de intensa conversación con los compañeros de expedición.
Durante el viaje afloran ilusiones, ideas, dudas, conclusiones, preguntas y respuestas que no pueden obviarse precisamente por la extrema cercanía que representa el escaso espacio vital de un vehículo.
Esta vez, el pasado 5 de Abril viajamos a Figueres, como asistentes de Pere Soler y con éste al volante, José Mª Doroteo y yo. La ilusión de re-encontrar a los compañeros/as ampurdaneses hace más agradable e interesante el trayecto desde Vilanova del Camí.
A veces pienso que las artes marciales son una mera excusa para estrechar lazos de amistad entre los seres humanos, Tal vez este debería ser, hoy en día, uno de sus principales objetivos. La técnica es secundaria.
Con una numerosa asistencia de más de veinte iaidoka, el curso se desarrolló en sesiones de mañana y tarde, trabajando las cinco primeras formas de la serie GO-YO (Shin – Ren – Sa- Yu – Sha) de Mugai Ryu Iaiheido durante la mañana y dedicando la tarde al trabajo de kenjutsu con el bokutô.
El grupo de Iaido del TADAIMA DOJO de José Miranda sensei es numeroso y se ve fuerte, cohesionado y con enormes ganas de trabajar y Pere Soler sensei quiso dejar patente el hecho de comprobar el incremento constante en la calidad técnica que está demostrando el grupo.
José Miranda sensei, como siempre luciendo con garbo su buen humor y su buen hacer, puso junto con Pere Soler la sal y la pimienta del seminario.
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