Fiesta Japonesa del Año Nuevo 2010

Miembros de Suiyokai en el "Kagamiwari"

Me pareció extraño dirigirme a una actividad que se celebraba con japoneses y no ir cargado de “armamento” ni llevar conmigo tan sólo un keikogi. Pero fue así, con ropa de calle y ligero de equipaje, como me dirigí con mi familia el pasado domingo 31 de enero al Hotel Melía de Barcelona, donde la Asociación de los empresarios japoneses en Catalunya (Barcelona Suiyokai), organizaba la Fiesta Japonesa del Año Nuevo.

Llegamos al Hotel con media hora de anticipación y ya todo daba la sensación de estar perfectamente controlado por los organizadores, aunque los asistentes no habían hecho acto de presencia en su gran mayoría.

Alex, Víctor Jr., Víctor(yo), Xavier y Marc

Esperamos en el lobby a nuestros amigos Araceli y Víctor, del Vendrell (Tarragona) quienes tenían la curiosidad de ver en directo, junto con sus hijos Alex y Marc, un evento de estas características.

Unos discursos de bienvenida y deseo a los asistentes de un Feliz Año del Tigre, por parte de los organizadores y del Cónsul General del Japón, dieron el pistoletazo de salida a la fiesta que duró unas dos horas y en la que tuvimos la oportunidad de degustar distintas variedades de pasteles de arroz “mochi”, típicos del Shogatsu así como disfrutar al presenciar la elaboración del mochi (Mochitsuki).

Elementos para el "Mochitsuki"

Distintas sopas fueron servidas en vasos de plástico, aunque este hecho no les restó el sabor que deseábamos encontrar en las mismas. Si mis hijos Víctor y Xavier se las tomaron, es que estaban buenas.

El concierto de tambores japoneses (wadaiko) a cargo de los alumnos del Colegio Japonés de Barcelona tuvo la intensidad esperada, aunque debido al gentío agrupado en las primeras filas era casi imposible poder ver en acción a los niños. En previsión de esto, es de agradecer que la organización colocara una gran pantalla (japonesa) que permitía presenciar el concierto a las filas de detrás, que éramos la inmensa mayoría de la multitud que llenaba la sala destinada a la fiesta.

No quiero olvidarme de la típica apertura del barril de sake (kagamiwari), la cual apenas pude apreciar debido a la distancia a la que me encontraba y lo ocupado que estaba degustando unas grandes, sabrosas y tiernas salchichas aderezadas con una importante cantidad de Ketchup y Mostaza.

Víctor, Alex, Xavier y Marc (de pié) combinando degustación y Nintendo.

El sorteo final de juguetes para los más pequeños suscitó un gran interés entre los mismos haciendo incluso que dejaran “aparcadas” momentáneamente sus Nintendo, lo cual parecía imposible.

No deja de ser curioso celebrar dos veces el Año Nuevo 2010 y estoy dispuesto a escuchar ofertas para celebrarlo una tercera vez…..si la ocasión lo merece.